Entrevista – Paz Aguado: «Me inspiro mucho en el silencio»
- «Siento que me gustaría llegar a más gente»
- «A veces me pasa que la gente llora»
- «Hay gente con la que te encuentras que la conoces de más de una vida»
Son muchos los cantantes que han comenzado componiendo en la intimidad de su cuarto, como si su talento fuera algo vergonzoso que nadie debiera descubrir. Lo que ocurre es que la música es un arte que surge del interior y que expresarla es como desnudar nuestra intimidad.
A Paz Aguado le ocurrió lo mismo. «Cantaba en mi habitación. Así, tan para adentro, que mi familia ni se enteraba», ha contado a Jungle Indie Rock. Un buen día, se convenció de que su pasión y sus canciones tenían que salir. «Y me gustó compartir, sacar todo esto que he llevado durante años, así, como muy guardado».
Esta cantautora, pintora e ilustradora valenciana afincada en Formentera «intercala pinceles y colores con la guitarra». Dice que la música le «sale como algo involuntario» que aparece al escuchar una especie de murmullo interno. «Cuando estoy en silencio, me vienen melodías, me vienen imágenes para pintar. Me inspiro mucho en el silencio».
Así ha compuesto y autoproducido el álbum Materia Sutil (2022), el EP Nexos (2020) y cuatro sencillos que incluyen su último single, Milenios (2024) y su gran éxito Hombre Agua (2020).
¿Cómo empezaste en la música?
Desde niña, siempre me ha gustado escribir. Siempre he sido muy autodidacta. Me encantaba la clase de música. Pero, por mi cuenta estudiaba flauta, guitarra, escribía canciones. Sólo las cantaba en mi habitación. Así, tan para adentro, que mi familia ni se enteraba.
Y al final me metí en una banda, de flautista. Empezamos a hacer encuentros musicales, jams… Y entonces empecé a cantar mis canciones a mis amigos. En el 2009 fue la primera vez que canté en público. Había un espectáculo de varios números cortos, de clown, y me invitaron a cantar una canción por el medio. Y me gustó. Me gustó compartir, sacar todo esto que he llevado durante años, así, como muy guardado.
Paz Aguado es compositora, cantante y además pintora e ilustradora ¿Cómo combinas tus dos facetas artística?
Dibujar y pintar son otras actividades que siempre me gustaron y en casa me animaron a desarrollarlas. Estudié Bellas Artes y muy pronto empecé a ganarme la vida vendiendo mis cuadros. Antes hacía muchas exposiciones y encargos. También he ilustrado algunos cuentos infantiles.
Ahora expongo y vendo mis obras en ferias de arte y artesanía en Formentera. El contacto con el público y con mis compañeros me nutre. Complementa las horas de soledad en el estudio. Cuando trabajo en casa, voy intercalando pinceles y colores con la guitarra, los versos y el canto. En las ferias también, además de pintar y exponer, puedo actuar y disfrutar de las actuaciones de otros músicos.
¿Cuáles son tus influencias en la música y en qué te inspiras para componer?
He escuchado y admirado a cantautores como Fabrizio de André o como Jorge Drexler. Últimamente me inspira mucho Aurora, la cantante noruega. En mi época de la infancia escuché de todo, música clásica, por ejemplo. Todo influye de alguna manera u otra pero estos cantautores sobre todo. Y luego he escuchado rock, los Ramones, por mi hermano mayor, que los ponía en casa todos los días y también me gustaban.
Pero no soy muy consumidora de música (me gusta ver música en directo, eso sí), porque cuando no estoy haciendo música, estoy escuchando los pájaros. Me inspira mucho la naturaleza, sobre todo un paisaje bello. Me eleva. Y el silencio también. Cuando estoy en silencio, me vienen melodías, me vienen imágenes para pintar. Me inspiro mucho en el silencio. Y en vivencias también, en mi relación con las personas que conozco.
En tus canciones, ¿compones primero la letra y luego la melodía o al revés?
Indistintamente, según viene. Hay veces que tengo la guitarra en las manos y me vienen unos acordes sin letra. O hay veces que estoy pensando en una letra que se me ha ocurrido y me llega la música después. Muchas veces sale como algo involuntario. Es algo que surge natural, una letra, un acorde y se va ensamblando.
Antes de tu primer álbum, Materia Sutil, publicaste un EP en 2020 que se llama Nexos. ¿Nos puedes hablar de estos trabajos?
Nexos es una cosa que me hacía mucha ilusión grabar, porque tengo casi 200 canciones que ya se me olvidan. Y me dije: “voy a empezar a grabar”. Y empecé a grabar sin tener ni idea de grabar. Y lo publiqué para compartirlo con mis amigos. Pero ahora me avergüenzo un poco, porque la calidad del sonido es pésima. Es una maqueta.
El álbum salió en 2022 y lo empecé a grabar un año antes. Llevaba muuuchos años queriendo grabarme. Pero como me gusta descubrir las cosas y entenderlas, me costó mucho tiempo grabar algo mínimamente entendible. Y fue este disco. Tiene unas canciones que son antiguas y otras que las acababa de componer mientras grababa.
Lo hice todo aquí en la postpandemia. Y con la introspección que vino en ese tiempo, ahí me di cuenta que tenía algo que valía la pena. Siempre había considerado que yo no era música, que solo me gustaba cantar. Y me lo tomé en serio. Me dije: “esto vale la pena. Es lo que yo deseo”. Y me lo permití. Me entregué a esto solo, a grabar el disco. Fueron meses de curro, de experimentación. Y fue muy bonito. Fue bonito el proceso y ahí me acepté. Acepté que sí que era cantautora. Y salió Materia Sutil.
A la vez que grababas, te surgieron canciones. ¿Te inspiró ese arranque y esa forma de aceptarte para componer mientras trabajabas en el disco?
Algunas canciones eran de hace años. Pero Años luz, Te veo y O2 las acababa de componer, eran muy recientes y se acaban de hacer a medida que las grababa. Igual tenía la letra y los acordes, pero no tenía arreglos, ni estructura y a medida que grababa… Sí, es muy creativo también el hecho de ponerse a grabar y a producir un tema. Ahí creo que es cuando se acaba de asentar una canción.
En marzo de 2024 llegó Milenios, tu primer sencillo después del álbum. ¿Qué significa para ti esta canción?
Esta canción me la inspiró una relación con una persona y la sensación de que hay gente con la que te encuentras que la conoces de más de una vida. Es una familiaridad y una afinidad que no puede ser que te la provoque el tiempo que has compartido con esta persona, sino que seguro que viene de algo muy profundo. Yo creo en la reencarnación. Habla de otras vidas y de esa afinidad.
¿Has llevado tus temas al directo?
Sí. Después de esa iniciación que he comentado, en 2009, he tenido varias formaciones. En los directos tengo dos músicos que me acompañan ya desde hace un par de años y es un apoyo. He tocado sobre todo en la isla. No hay muchos sitios porque es una isla pequeña. Pero prácticamente he tocado en todos los sitios posibles, en plazas, en los mercados de artesanía, en la Sala de Cultura. Y el año pasado estuve en el festival Barnasants en Valencia, Barcelona, Mallorca y Menorca. También he tocado cuatro o cinco veces en un café de Valencia, que es mi ciudad natal.
¿Te seduce el hecho de tocar no solo en Formentera?
Siento que me gustaría llegar a más gente. No ser tampoco hiperfamosa, pero tengo ganas de viajar, de compartir mi música. Porque cuando la gente se emociona, es muy bonito. A mí me llena mucho. Y sí que me gustaría llegar a más gente, salir un poco de la isla. Para salir de Formentera hay que coger barco, aviones. Y es que, a veces, nos cuesta un poco salir.
La gente que me encuentro aquí en Formentera en verano, sobre todo, es gente de todas las edades, niños, jóvenes, gente mayor. En Valencia cuando he tocado viene mi familia, mis amigos, gente joven. Es gente sensible, eso sí, porque a veces me pasa que la gente llora.
¿Qué piensas de la industria musical y cuál crees que es tu sitio en ella?
No la conozco mucho. Tengo muchos amigos músicos artistas, pero que no están metidos en la industria musical. Solo tengo un amigo que está bastante en ello, pero no lo veo mucho. Lo que conozco es por las redes. Por un lado veo que está más accesible a todos. Antes tenías que irte a un estudio a grabar. Ahora sabemos que se ha democratizado lo que es la creación de música. Pero al mismo tiempo, hay mucho caos. A veces hay tanta información y tanta oferta que puedes ver en tu mano, en el móvil, que es un poco confuso.
“¿Y mi sitio? Todavía lo estoy buscando”, se despide Paz Aguado con una sonrisa.
